En el Litoral argentino, hay un lugar donde el cielo parece pintarse a mano cada tarde. Rodeado de naturaleza autóctona, fauna silvestre y miles de yatay, este destino es ideal para caminar, relajarse y contemplar uno de los atardeceres más sorprendentes del país.
Se trata de un área protegida con abundante vegetación muy cerca de la costa de uno de los ríos más importantes de Sudamérica, es muy visitada y se puede pasar un fin de semana en ella. Es una opción tranquila y de fácil acceso para quienes buscan desconectarse y en contacto con la naturaleza disfrutando del colorido cielo sin alejarse demasiado de la ciudad.
En pleno corazón del departamento Colón, el Parque Nacional El Palmar está ubicado a tan solo 380 kilómetros del Obelisco porteño. Este rincón entrerriano se aleja del paisaje montañoso tradicional para proponer otra postal, la de un mar de palmeras que se extiende hasta donde alcanza la vista, con cielos amplios que se tiñen de dorado y violeta cuando cae el sol.
Entre las principales acciones que allí se pueden realizar están:
Caminatas guiadas.
Senderos autoguiados.
Observación de aves.
Ciclismo.
Paseos a la vera del río Uruguay.
Explorando algunas de ellas, las mismas prometen aventuras para hacer como, por ejemplo, senderos y miradores para disfrutar a paso lento. Entre las actividades destacadas, se puede recorrer el Sendero del Muelle, un trayecto corto que desemboca en la costa del río Uruguay y ofrece una vista privilegiada del atardecer.
Otra opción es el Camino al Mirador del Palmar, ideal para observar cómo se oculta el sol detrás del monte nativo. También está el Sendero Los Loros, de baja dificultad y con cartelería interpretativa para conocer la flora y fauna del lugar.
Los visitantes pueden combinar caminatas con momentos de descanso en los sectores de picnic y camping del parque. En invierno, los días suelen ser soleados y templados, lo que permite aprovechar al máximo el entorno sin las altas temperaturas del verano.

