La Ciudad que «no duerme» sigue innovando. Buenos Aires es una de las 50 mejores para vivir y culturalmente es infinitamente rica. Ahora, suma una nueva propuesta que deslumbrará a los porteños y los turistas que llegan de a miles cada año a La Reina del Plata.
Un ícono porteño se reinventa y se suma al circuito turístico desde un nuevo ángulo. A partir de mayo, el Obelisco de Buenos Aires abre sus puertas al público con un mirador a más de 67 metros de altura. Desde entonces, el monumento que viste en mil postales para ocasiones especiales como, por ejemplo, el homenaje que le rindió a la memoria del Papa Francisco recientemente fallecido en la madrugada de ayer, ahora se puede vivir desde adentro.
Por primera en 89 años de historia, el Obelisco podrá recorrerse gracias a la instalación de un ascensor interno y a la apertura de su cúspide como punto panorámico desde la cual se ve la Ciudad de Buenos Aires desde su epicentro histórico en la intersección de las avenidas 9 de Julio y Corrientes, esquina simbólica de la «Ciudad de la furia».
Esta transformación suma un nuevo atractivo al turismo urbano de Buenos Aires poniendo en valor la estructura histórica del monumento, adaptándola con nueva infraestructura eléctrica y detalles de preservación patrimonial.
El ascensor al «cielo porteño» es de tecnología moderna, de diseño vidriado y transporta al turista hasta casi la cima en apenas un minuto. Desde allí, las personas deben continuar subiendo 35 escalones hasta llegar a las ventanas que dan una vista única de la Ciudad en 360 grados. Además, se incorporó una escalera de emergencia que serpentea alrededor del eje del elevador.
Mayo es el mes designado para dar inicio al mirador del Obelisco en el marco de un nuevo aniversario del símbolo porteño. En este contexto, habrá visitas guiadas y gratuitas para quienes quieran vivir la experiencia desde adentro. Los cupos serán limitados, por lo que se recomienda estar atentos a los canales oficiales donde se habilitarán las inscripciones.
Con esta relevante propuesta, el Obelisco ya no solo será objeto y marco para fotografiarse con la ciudad de fondo, sino que, también, ahora se renovarán, pero, desde las alturas.