La sopa crema de calabaza, un plato emblemático en la gastronomía argentina, se ha convertido en un favorito durante las estaciones más frías. Su origen se encuentra en la cocina criolla, donde los ingredientes locales se combinan en recetas familiares que se transmiten de generación en generación. La calabaza, conocida por su dulzura y su textura cremosa, es la protagonista indiscutible de este reconfortante platillo.
A lo largo de los años, la sopa ha evolucionado para incluir diversas versiones que incorporan otros ingredientes típicos de la región. Sin embargo, la receta clásica permanece en el corazón de muchas familias argentinas, quienes la preparan en reuniones familiares y celebraciones con amigos.
Su sencillez en la preparación la convierte en una opción ideal para cualquier hogar. La calabaza, rica en vitaminas y nutrientes, aporta sabor al tiempo que resulta económica y accesible. Un plato nutritivo y delicioso que se puede servir tanto como entrada como plato principal. Además, su color vibrante y su aroma envolvente despiertan los sentidos, invocando recuerdos de la infancia y tradiciones familiares.
Asimismo, la sopa crema de calabaza es versátil. Se pueden añadir ingredientes como jengibre, crema, o incluso un toque de picante para realzar su sabor original. Esta adaptación permite a las familias argentinas personalizar la receta a su gusto, brindando la posibilidad de experimentar con diferentes sabores mientras se preserva la esencia del plato.
Con cada cucharada, la sopa no solo brinda calor físico en las frías noches invernales, sino que también ofrece un sentido de pertenencia y tradición. Prepare esta sopa en su hogar y compártala con sus seres queridos; será una experiencia reconfortante que seguramente habrá de apreciarse.
Pasos
Comenzar por pelar y trocear la calabaza.
En una olla grande, calentar un poco de aceite y agregar cebolla y ajo picados.
Cuando la cebolla esté dorada, añadir la calabaza y un litro de caldo.
Cocinar a fuego medio hasta que la calabaza esté tierna.
Utilizar una mixer para procesar la mezcla hasta obtener una crema suave.
Ajustar la sal y pimienta al gusto.
Servir caliente, opcionalmente con un chorrito de crema y semillas tostadas por encima.
Ingredientes
1 kg de calabaza, 1 cebolla, 1 diente de ajo, 1 litro de caldo de verduras, aceite de oliva, sal, pimienta y crema de leche (opcional).

