No solo los amantes del cine, las termas y el turismo son quienes visitan el lugar, ya que, el sitio es conocido mundialmente por una inundación que lo sepultó bajo el agua hace 30 años y, se convirtió en un paso obligado para quienes desean conocer la historia. Está a casi siete horas de viaje, en auto, desde la Ciudad Autónoma de Buenos Aires atravesando gran parte de la llanura bonaerense en dirección sur.
Se trata de Villa Epecuén ubicada a escasos siete kilómetros de Carhue en el partido de Adolfo Alsina y un costado de la ruta provincial N°60. Además de recuerdos dolorosos, el pueblo denominado fantasma nunca dejó de llamar la atención en los ojos curiosos de la gente que lo visita durante todo el año, para conocer su historia y llevarse, en fotos, más que las imágenes en la retina cargadas de angustia por lo que ven y, escuchan o reafirman lo sabido de lo que antaño devastó el lugar, ya que, a él han llegado productores de cine y publicistas para grabar películas y comerciales en sus ruinas.
También, en 2017, fue reconocido por el Récord Guinness al haber organizado y pasado la prueba de haber reunido el mayor número de personas tomadas de la mano flotando en las aguas del lago. Hasta el momento, la marca era de China con 650 personas que, en Argentina, se superó ampliamente con 1.941 ciudadanos el 29 de enero de ese año, según la supervisión del ente fiscalizador de los récords.
El misterioso pueblo formó parte una película de terror del cine nacional. Un año antes del récord, fue escenario de la filmación del largometraje Terror 5. La película combina cinco historias unidas como la miseria, el abuso, poder, violencia y la indiferencia social. El lugar fue elegido por su atmósfera única y desoladora, ideal para películas de terror. La estética apocalíptica del lugar lo volvió muy atractivo para producciones cinematográficas como esta.
Además, marcas internacionales de bebidas energizantes también visitaron el lugar y filmaron comerciales.
Entre otros, estos dos pueblos de características más bien rurales y, con mucha y activa participación en el rubro turístico y gastronómicos en territorio bonaerense, fueron parte de la escenografía de películas celeste y blanca.
Uribelarrea
Este pintoresco pueblo de estilo colonial, ubicado en el partido de Cañuelas, es uno de los más utilizados en cine por su arquitectura bien conservada y su aire de época. Ha sido locación de varias producciones, tanto nacionales como internacionales. En 1996 se filmó Evita y en 2016 El Ciudadano Ilustre.
San Antonio de Areco
Con su fuerte identidad gauchesca y calles empedradas, este pueblo ha sido elegido por su autenticidad histórica. Allí se filmaron películas de época o que retratan el campo argentino tradicional. Una de ellas fue, en 1984, Camila.
Alsina
Es un pueblo del partido de Baradero que se encuentra en el km 127 de la ruta 9. Era un rincón desconocido hasta que se convirtió en el set de filmación de la exitosa película argentina, La Odisea de los Giles.
De esta manera, las productoras encuentran locaciones adecuadas para sus proyectos y, los pueblos, en muchos casos olvidados, pasan a estar visibles nuevamente gracias a estas filmaciones que le devuelven o le agregan vida, ya que, muchos de ellos, además del campo como una de las actividades económicas en general, viven, de acuerdo a su ubicación de las industrias y el turismo rural que crece cada vez más con las ofertas gastronómicas en diferentes pulperías y viejos almacenes de ramos generales reconvertidos en restaurantes de campo que le dan una variable más a los citadinos para desconectar de la rutina y conectar con la naturaleza gauchesca cerca de sus hogares.